Aquí comparto desde el primer día mi trayectoria, como he superado muchas cosas a lo largo de los años.

Cómo volví a estudiar a los 45 años, creé mi estudio de diseño en 2019 y mi marca en 2021.

Como dije en la Universidad, la Empresa más importante eres tú misma.

He trabajado mucho en ello y justo cuando superé mis dudas y era solo una mamá perruna feliz, trabajando en casa, descubrí que, sin darme cuenta, la misofonía había estado dictando cómo de bueno o cómo de malo iba a ser mi día.

Tan pronto como descubrí esta condición, decidí quitarme el estigma hacia mí misma y hacia los demás.

Cualquier lucha mental merece, al menos, si no empatía, alguna forma de respeto.

Ayuda mucho poder identificarse con los demás.

Da resiliencia y una sensación de liberación al no sentir que lo que estás pasando es un tabú. 

Y aún más importante, no sentirte culpable por algo con lo que naciste.

En este momento, estoy trabajando muy duro para aceptar, una vez más, la realidad de mi vida.

Ojalá la sensibilidad a los sonidos no fuera un problema para mí.

Ojalá estuviera en un entorno más amigable que no desencadenara misofonía constantemente.

Pero la realidad es la que es.

Una de las cosas que hacen a esta marca especial, es alentar a encontrar alegría a pesar de los fracasos y decepciones.

No importa lo difícil que sea encontrar humor en ciertas situaciones o el lado kafkiano de las mismas.